Terminaba ayer en el post hablando de
la importancia de crear un clima de confianza entre coach y coachee
(rapport), con este punto me gustaría abrir este post y poder
profundizar en cómo trabajarlo.
Con el término rapport sucede lo mismo
que con el término coaching elegir una traducción exacta en castellano
es tarea complicada. La traducción más cercana sería la de empatía. Sin
embargo, este término no recoge todo lo que el concepto nos aporta
utilizando su acepción inglesa. Por empatía nuestro diccionario
establece la siguiente definición: “identificación mental y afectiva de
un sujeto con el estado de ánimo de otro”. Por rapport, podemos
referirnos a la sintonía que se establece entre dos personas para
facilitar su comunicación. Va más allá del concepto de empatía, ya que
pasa por la identificación pero continúa con el acompasamiento
(adecuación) con el otro a través de la postura corporal, sus
movimientos y sus gestos; la frecuencia y profundidad en la respiración;
tiempo, tonalidad, ritmo y volumen al hablar; parpadeo y vías de acceso
ocular y sus patrones de lenguaje (visual, auditivo o kinestésico). Por
esta serie de diferencias utilizaré el término rapport frente a
empatía.
El rapport es la habilidad de sintonizar
y permanecer sintonizado con el estado emocional de tu interlocutor a
través del acompasamiento de su comunicación no verbal, paralenguaje y
su comunicación verbal. De acuerdo con esta definición, puedes intuir
que existe un rapport positivo donde se establece una sintonía emocional
que proporciona unas condiciones óptimas para la comunicación con tu
coachee. Para un coach es fundamental crear un rapport adecuado con su
cliente. Se debe propiciar una conexión entre ambos que facilite la
confianza del cliente para poder hablar sobre cualquier tema que desee
con absoluta libertad. De ese clima de confianza, sinceridad y apertura
depende el éxito en un proceso de coaching.
Empecemos reflexionando sobre una serie de cuestiones:
- ¿Qué es lo que te haría confiar en otro?
- ¿Qué necesita el otro para confiar en ti?
- ¿Cómo ve el otro que le escuchas y buscas comprenderlo?
- ¿Cómo puedes establecer un clima de confianza con el otro?
- ¿Cómo puedes favorecer una comunicación positiva?
- ¿Cómo puedes establecer un buen rapport con otra persona?
La forma más sencilla y directa de crear
un buen rapport con otro es a través del cuerpo, se denomina rapport
fisiológico. Te hablo de acompasar (adecuar) con el otro a través de la
postura corporal, sus movimientos y sus gestos; la frecuencia y
profundidad en la respiración y tiempo, tonalidad, ritmo y volumen al
hablar. ¿Cómo establecer rapport fisiológico? La pregunta es sencilla de
responder y a la vez requiere de un constante entrenamiento por tu
parte: deberás imitar al otro, a tu coachee en este caso, en los
aspectos arriba mencionados. Hablo de una imitación sutil. Si el otro se
siente imitado lo tomará como una ofensa, como una tomadura de pelo y
el efecto será el contrario al deseado. Un aspecto muy importante para
comenzar a trabajar en el establecimiento del rapport es la respiración.
El ritmo respiratorio es una señal inequívoca de su estado de ánimo. Te
propongo que realices el siguiente ejercicio:
- Selecciona una persona de tu entorno cercano que pueda ofrecerte después retroalimentación. No le facilites información sobre el ejercicio que estás realizando para no condicionar su respuesta. Mantén una conversación agradable y durante ésta procura sintonizar su respiración en frecuencia y profundidad con la de la otra persona.
Tras el ejercicio respóndete a las siguientes cuestiones:
- ¿Cómo se os habéis sentido? Pregúntaselo de forma abierta para obtener una información acertada.
- ¿Cómo ha cambiado la comprensión de la otra persona?
- ¿Qué has aprendido?
- ¿Qué podrías hacer para mejorar tu acompasamiento de la respiración?
Realiza este ejercicio tantas veces como
sea necesario con diferentes interlocutores hasta que la imitación de
la respiración te resulte más sencilla y sea un proceso natural. Otra
manera de desarrollar un rapport fisiológico con una persona es realizar
movimientos o gestos parecidos a los que ella hace de forma sutil y con
un cierto retraso en el tiempo e imitar su postura corporal. Durante tu
próxima conversación prueba por ti mismo.
• Concéntrate en la persona con la que
quieres establecer esa sintonía corporal. Sigue de forma sutil sus
movimientos y gestos. Iguala las respiraciones y la postura corporal.
Por ejemplo, si se inclina adelante, inclínate ligeramente adelante, si
sonríe hazlo también. La imitación no tiene por qué ser exacta, si el
otro se toca la cara tú te puedes tocar el pelo. Si el otro posa la mano
en la mejilla, tócate la barbilla. No tienes por qué seguir con tu
imitación todos los movimientos de la otra persona. Bastará con que
sigas algunos de ellos.
Reflexione sobre las cuestiones
planteadas en el ejercicio de la respiración. El tono de voz y el estilo
del lenguaje que nuestro interlocutor utiliza son elementos que también
puedes imitar para establecer un adecuado rapport fisiológico que
favorezca una comunicación eficaz. Te propongo seguir en la línea de
trabajo que estás realizando. Participa en una conversación en la que te
centres en imitar el tiempo, tonalidad, ritmo y volumen al hablar con
tu interlocutor. Tienes que hacerlo de manera delicada para no molestar
al otro. Concéntrate en las similitudes que tienes con tu compañero de
conversación, no en las diferencias para que este trabajo le sea más
sencillo de realizar.
http://mariajosealaminoscoach.com
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